Aunque Arnold Schwarzenegger es sinónimo de películas de acción como Terminator y Conan el Bárbaro, hubo un momento en el que su carrera dio un inesperado giro hacia la comedia slapstick en el Viejo Oeste.
Se trata de El Villano (1979), una comedia western que lo reunió con la leyenda de Hollywood, Kirk Douglas, en una de las colaboraciones más inusuales y subestimadas del cine.
Dirigida por Hal Needham —el mismo detrás de éxitos como Smokey and the Bandit—, El Villano (también conocida como Cactus Jack en Reino Unido y Australia) fue una parodia inspirada directamente en los clásicos personajes de Looney Tunes, como el Coyote y el Correcaminos. Sí, en serio: una caricatura de acción real protagonizada por un novato Schwarzenegger y un veterano Douglas, en lo que sería el último western del segundo.
Un héroe ingenuo y un villano desastroso
Arnold Schwarzenegger interpretó al “Handsome Stranger”, un vaquero de acento austriaco y corazón noble que debe escoltar a la bella Charming Jones (interpretada por Ann-Margret) a través del Oeste, cargando con una fuerte suma de dinero. Lo que no sabe es que detrás de ellos va el torpe forajido Cactus Jack, encarnado por Kirk Douglas, quien intenta robar el botín mediante planes tan absurdos como ineficaces.
El Villano, una caricatura viviente en el cine
Lo que distingue a El Villano de otros westerns cómicos es su clara inspiración en los dibujos animados de Warner Bros. Las trampas estilo Acme, las caídas ridículas y los besos inesperados son constantes en este filme que juega como una versión en carne y hueso del universo de los Looney Tunes. Douglas, como el Coyote, fracasa una y otra vez, mientras Schwarzenegger avanza con suerte e inocencia al estilo del Correcaminos.
Aunque su humor no fue del gusto de todos en su momento, la película hoy es vista como una rareza de culto que adelantó el tono cómico que Arnold dominaría años después en cintas como Kindergarten Cop o Twins.
Schwarzenegger, mucho antes de Terminator
En 1979, Arnold Schwarzenegger aún no era la superestrella global que luego conquistaría el mundo del cine de acción. El Villano representó una de sus primeras incursiones como protagonista, mostrando desde entonces un carisma cómico que muchos tardarían en reconocer.
Curiosamente, esta película también reveló la versatilidad de Kirk Douglas, actor nominado al Oscar y conocido por clásicos como Spartacus o Paths of Glory, al ponerse al servicio de una comedia física repleta de gags visuales.
Un western que merece ser redescubierto
Si bien El Villano fue un fracaso comercial y recibió duras críticas tras su estreno, hoy en día es considerada una joya escondida para fans del western y del humor absurdo. Su estilo caricaturesco, su elenco improbable y su tono irreverente hacen que valga la pena redescubrirla, especialmente si eres fan de las películas de Schwarzenegger, el cine del oeste o las parodias setenteras.
Así, esta comedia western olvidada, que unió a dos leyendas de generaciones distintas, demuestra que incluso las ideas más disparatadas pueden encontrar su lugar en la historia del cine.
