El flamante Telescopio Espacial James Webb tomó sus primeras imágenes y espectros de Marte en la primera semana de septiembre, y ya podemos ver vistas sin precedentes del planeta rojo y su sensibilidad infrarroja
El observatorio único de Webb, ubicado a casi 1,5 millones de kilómetros del punto 2 (L2) de Lagrange Sol-Tierra, ofrece una vista del disco observable de Marte (la parte del lado iluminado por el sol que mira hacia el telescopio).
Esto permite que el nuevo dispositivo capture imágenes y espectros con la resolución espectral necesaria para estudiar fenómenos a corto plazo, como tormentas de polvo, patrones climáticos, cambios estacionales y en diferentes momentos (día, atardecer y atardecer). noche) un día en Marte.
Su capacidad para capturar imágenes fue un gran logro para el creador del telescopio, porque el instrumento de Webb era tan sensible que, sin técnicas especiales de observación, la brillante luz infrarroja de Marte sería deslumbrante y causaría una especie de fenómeno A conocido como “saturación del detector”. ” .
Para hacer esto, los astrónomos ajustaron la captura de Webb al brillo extremo de Marte utilizando tiempos de exposición muy cortos, midiendo solo una parte de la luz que llega a la sonda y aplicando técnicas especiales de análisis de datos.
Como resultado, pudieron disfrutar de las primeras imágenes Webb de Marte, que mostraban una región del hemisferio oriental de Marte en dos longitudes de onda diferentes, o colores de luz infrarroja. También se ve en la imagen un mapa de referencia de la superficie de la NASA y el altímetro láser Mars Orbiter (MOLA) a la izquierda, los dos campos de visión del instrumento Webb NIRCam se superponen.
