El alcalde de Durango, José Antonio Ochoa Rodríguez, realizó un viaje a Estados Unidos sin informar ni pedir permiso al Cabildo, lo que ha generado críticas y cuestionamientos sobre el motivo, los acompañantes y el costo de su traslado.

Sin previo aviso y sin haber solicitado autorización al Cabildo, el alcalde José Antonio Ochoa realizó un viaje a los Estados Unidos durante toda la semana en curso, dejando en incertidumbre el propósito y la ubicación exacta de sus actividades laborales.

Durante este viaje, líderes de la comunidad duranguense radicada en Chicago, Illinois, confirmaron haber sostenido una reunión con el presidente municipal de Durango el pasado lunes por la tarde en un restaurante del barrio de Pilsen, que alberga una considerable población de mexicanos, incluyendo a duranguenses.

La comitiva que acompañó al alcalde Ochoa incluyó a Valeria Gutiérrez, asistente y responsable de la oficina de Fomento Económico; Ignacio Orrante, director de Finanzas y Administración.

Se mencionó que Ochoa dejó Chicago el miércoles donde sostuvo reuniones con otros grupos de paisanos, sin especificar cuáles. Sin embargo, hasta la fecha, se carece de información detallada, precisiones y el propósito de la misión de este grupo de funcionarios municipales en la ciudad.

Se ha sabido extraoficialmente que el grupo viajó a los Estados Unidos durante el fin de semana pasado y tiene previsto regresar el próximo domingo, lo que equivale a una semana completa. También se ha mencionado que podrían visitar Los Ángeles, California, pero no se tiene confirmación de su estancia en esa ciudad, donde residen miles de duranguenses.

Hasta la fecha, no se ha proporcionado información oficial sobre la ausencia de Ochoa y su equipo en sus responsabilidades laborales habituales. Algunos de los funcionarios que continuaron trabajando durante estos días aseguran que Ochoa viajó a Los Ángeles en lugar de Chicago, aunque no se puede confirmar.

La pregunta que surge es: ¿Por qué se optó por llevar a cabo este viaje en relativo secreto? En un momento en que la austeridad y el manejo responsable de los recursos son fundamentales, los representantes del pueblo deben ser transparentes en sus acciones.