La iniciativa, impulsada por el diputado Benjamín Robles Montoya del PT, busca mejorar las condiciones de trabajo de los mexicanos, así como fomentar la productividad, la competitividad y el bienestar de los trabajadores y sus familias. Según el dictamen, la reducción de la jornada laboral no implicará una disminución del salario ni de las prestaciones de los trabajadores.

El dictamen también establece que la jornada diurna será la comprendida entre las 6:00 y las 19:00 horas; la jornada nocturna será la comprendida entre las 19:00 y las 6:00 horas; y la jornada mixta será la que comprenda períodos de tiempo de las jornadas diurna y nocturna, siempre que el período nocturno sea menor de tres horas y media.

Asimismo, el dictamen señala que cuando el trabajador preste sus servicios más allá de la jornada legal, tendrá derecho a una prima adicional del cien por ciento sobre el salario que corresponda a las horas de la jornada. Las horas extras no podrán exceder de tres por día ni de nueve por semana.

La iniciativa ha generado opiniones encontradas entre los sectores empresarial y sindical. Por un lado, algunos empresarios han manifestado su rechazo a la propuesta, argumentando que afectará la competitividad y la generación de empleos, y que no se ha tomado en cuenta la opinión del sector privado. Por otro lado, algunos sindicatos han expresado su respaldo a la propuesta, considerando que beneficiará a los trabajadores y que se ajusta a los estándares internacionales.

La reducción de la jornada laboral es un tema que ha cobrado relevancia en el contexto de la pandemia por Covid-19, que ha impactado en el mercado laboral y en las formas de trabajo. Algunos países como España, Finlandia y Nueva Zelanda han impulsado o analizado medidas para reducir las horas de trabajo y mejorar la calidad de vida de los trabajadores.`