El icónico Puente de Otinapa, también conocido como el Puente Ferroviario del Río Chico, se encuentra en grave deterioro tras la extracción de rieles y durmientes de madera, elementos esenciales para su estructura
Un video difundido en redes sociales muestra el impacto de este acto, que ha desatado alarma por la pérdida patrimonial y los riesgos para los visitantes en Durango
Robos y desmantelamiento del Puente de Otinapa
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y agentes estatales intervinieron en el lugar, pero los responsables lograron huir, dejando un campamento improvisado. Este incidente pone en evidencia la urgente necesidad de reforzar la protección de las infraestructuras históricas de Durango.
El Puente de Otinapa: una joya del siglo XX
Construido en 1910 como parte de un ambicioso proyecto ferroviario para conectar Durango con el puerto de Mazatlán, el puente de 120 metros de altura y 388 metros de longitud nunca llegó a cumplir su propósito original. Sin embargo, se convirtió en un atractivo turístico destacado, famoso por actividades de ecoturismo como el salto en bungee, senderismo y motocross.
Consecuencias del desmantelamiento
La extracción de materiales compromete no solo la estabilidad estructural del puente, sino también su valor como destino turístico y parte de la historia de Durango. La falta de barandales, señalización y mantenimiento incrementa los riesgos de accidentes fatales.
Impacto en el turismo y la economía
El deterioro del Puente de Otinapa podría ahuyentar a turistas y afectar negativamente la economía local. Este sitio representa un punto de encuentro entre historia y naturaleza, y su preservación es clave para garantizar que continúe siendo un emblema de orgullo para Durango.
Existe preocupación asegura Rafael Sarmiento
Rafael Sarmiento Aguirre, del grupo Otinapa Camp, expresó su preocupación, calificando el acto como “una verdadera tristeza” y exhortó al gobierno a tomar medidas inmediatas para proteger los tesoros históricos de Durango. Por su parte, Manuel de la Peña de la Parra, regidor por Movimiento Ciudadano, solicitó una investigación exhaustiva para sancionar a los responsables. “Este puente no solo es una infraestructura ferroviaria; es parte de nuestra historia y un motor económico”, afirmó.
Necesidad de restauración urgente
La restauración del Puente de Otinapa requiere acciones inmediatas. Un proyecto integral podría no solo devolverle su estabilidad estructural, sino también revitalizar su potencial turístico. Este esfuerzo es esencial para conservar un legado que representa la identidad cultural y el desarrollo económico de Durango.
Puente de Otinapa: entre historia y futuro
La situación actual del Puente de Otinapa es un recordatorio de la importancia de proteger el patrimonio histórico. Su preservación no solo asegura el legado para las futuras generaciones, sino que también promueve el turismo sostenible y el desarrollo económico regional. Las autoridades deben redoblar esfuerzos para garantizar que esta joya histórica continúe siendo un símbolo de Durango.