Durango, México (9 de abril de 2024) –
La comunidad de Durango se encuentra consternada por el envenenamiento masivo de más de 30 perros en las inmediaciones del Club Campestre. Este acto de crueldad animal ha generado indignación y preocupación, no solo por la pérdida de las mascotas, sino también por el riesgo que representa para la fauna nativa y el medio ambiente.
Vecinos alzan la voz
Los residentes de los fraccionamientos cercanos al Club Campestre han denunciado la muerte de sus mascotas, señalando que el envenenamiento se habría producido mediante carnadas lanzadas en la zona. El dolor y la desolación son palpables entre los afectados, quienes exigen justicia por sus animales y medidas contundentes para evitar que este tipo de tragedias se repitan.
Amelia Salas, presidenta de la Confederación Próvida Animal y Medio Ambiente (COPAME), ha responsabilizado al personal del Club Campestre por este acto atroz. Salas ha señalado que la mayoría de los perros afectados eran animales de compañía, lo que agrava aún más la gravedad del caso.
Acciones legales y protección ambiental
COPAME ha presentado una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado y planea recurrir a otras instancias como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua). La preocupación por el impacto ambiental del envenenamiento es latente, ya que la sustancia utilizada podría contaminar el agua y el suelo, poniendo en riesgo a la fauna nativa y a otros animales.